Esta es la empresa china que se apodera del negocio petrolero en Irán y Venezuela
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La empresa china a pesar de las sanciones de EEUU siguió operando con crudo de Irán y Venezuela. Además amplió su flota de barcos a 14 para transportar al menos 30 millones de barriles de crudo.
Redacción | Primer Informe
Una empresa china es quien se ha apoderado del negocio petrolero en Irán y Venezuela a pesar de que EEUU la incluyó en una “lista negra” hace dos años por operar con crudo iraní, aseguraron fuentes citadas por Reuters.
Concord Petroleum Co, conocida también como CCPC, se ha convertido en protagonista en el suministro de crudo sancionado de Irán y Venezuela, y su expansión en el comercio de Venezuela, no había sido informado con anterioridad y resalta las limitaciones del sistema de sanciones de Washington.
Los detalles de los acuerdos fueron descritos a Reuters por una serie de personas, incluida una fuente con sede en China conocedora de las operaciones de CCPC, funcionarios iraníes y una fuente de la compañía petrolera estatal venezolana PDVSA.
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¿Cómo se dio la relación de CCPC con PDVSA?
CCPC se involucró en el comercio petrolero venezolano este año a través de acuerdos con pequeñas refinerías chinas independientes, conocidas como «teteras», según los cronogramas de carga mensuales, calendarios de exportación y facturas de abril y mayo de este año de PDVSA.
Los datos de seguimiento de petroleros y la fuente de la petrolera venezolana también revelaron la relación entre la empresa china y la estatal venezolana.
La firma registrada en Hong Kong se ha convertido con rapidez en un socio importante para Caracas, fletando barcos en abril y mayo.
Estos barcos fletados por la empresa china llevaban más del 20% de las exportaciones totales petroleras venezolanas en ese período. Esto fue casi 445 millones de dólares en crudo, mostraron los documentos de PDVSA y datos de seguimiento de petroleros.
CCPC no alquiló ningún barco que transportara crudo venezolano en junio, según los documentos.
Las estrategias de Irán y Venezuela para seguir operando
Refinerías de todo el mundo, incluídas las estatales de China, no siguieron comprando crudo a Irán y Venezuela, luego de que EEUU impusiera sanciones. Esto obligó a PDVSA a retirar millones de barriles por día de las exportaciones y miles de millones de dólares de sus ingresos.
Es por ello que Teherán y Caracas emplearon diferentes técnicas para sortear las sanciones de EEUU. En el juego del gato y el ratón recurrieron a tácticas como las transferencias de barco a barco, empresas fantasmas y intermediarios que operan fuera del ámbito financiero estadounidense.
El año pasado, CCPC adquirió al menos 14 tanqueros para transportar crudo desde Irán o Venezuela a China, dijeron dos de las fuentes.
«China mantiene intercambios normales y legítimos con Irán y Venezuela bajo el marco del derecho internacional», dijo un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China. Además dijo que estas operaciones «merecen respeto y protección».
«China se opone firmemente a las sanciones unilaterales e insta a Estados Unidos a eliminar la ‘jurisdicción de brazo largo’ sobre empresas e individuos», agregó.
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