China corta lazos militares con EEUU y sanciona a Pelosi por su visita a Taiwán
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Las últimas represalias se produjeron cuando los ejercicios militares lanzados por Pekín enviaron aviones de guerra, buques de guerra y misiles amenazadoramente cerca de Taiwan, a pesar de las crecientes críticas.
Redacción | Primer Informe
China anunció el viernes que interrumpirá la cooperación con Estados Unidos en ámbitos como las relaciones militares y el cambio climático. Al mismo tiempo impuso sanciones a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, como muestra de las represalias de Pekín por su visita a Taiwán.
Las nuevas medidas se anunciaron mientras China lanzaba furiosamente ejercicios militares a raíz de su viaje a principios de esta semana, enviando aviones de guerra, barcos navales y misiles amenazadoramente cerca de Taiwán, a pesar de las crecientes críticas.
La visita no anunciada de la delegación estadounidense a Taiwán ha alimentado una crisis cada vez mayor, aumentando el temor a un conflicto en la región y avivando las tensiones entre Washington, sus aliados y Pekín.
Pekín dijo el viernes que cancelará las llamadas telefónicas entre los comandantes militares regionales, las reuniones de defensa, las conversaciones sobre seguridad marítima y sobre el cambio climático. También dijo que pondría fin a la cooperación con Estados Unidos en materia de lucha contra las drogas, la devolución de inmigrantes ilegales y la delincuencia transnacional. Anteriormente, China tomó medidas personales contra Pelosi, anunciando sanciones contra la presidenta y su familia inmediata en respuesta a lo que el Ministerio de Asuntos Exteriores chino calificó de «provocaciones atroces».
Las sanciones no especificadas, la última represalia de China por el breve viaje a la isla autónoma que reclama como territorio propio, se produjeron mientras Washington y sus aliados instaban a la desescalada.
Estados Unidos convocó el jueves al embajador chino para presentar una protesta formal por las acciones de Pekín contra Taiwán y reiterar que Washington no quiere avivar una crisis en la región, según confirmó el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby.
Pelosi, en Japón para la última parada de su gira por Asia, dijo que no se permitirá que China tenga éxito en sus esfuerzos por aislar a Taiwán.
«Pueden tratar de impedir que Taiwán visite o participe en otros lugares, pero no aislarán a Taiwán impidiendo que viajemos allí», dijo el viernes horas antes de las sanciones contra ella.
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Venganza china
La respuesta de China se había dirigido hasta ahora en gran medida a la isla de más de 23 millones de habitantes que se encuentra justo al otro lado del estrecho de Taiwán.
Pekín comenzó el viernes por la mañana un segundo día de ejercicios militares en torno a la isla, enviando múltiples buques y aviones militares a través de la línea divisoria del estrecho, que ha sido una zona de amortiguación no oficial durante décadas.
Un día antes, disparó misiles balísticos, al menos uno de los cuales se jactó de haber sobrevolado directamente la isla y cinco de los cuales, según Japón, aterrizaron en las aguas de su zona económica exclusiva.
Los aviones militares chinos realizaron 68 salidas y 13 buques de guerra llevaron a cabo frecuentes ejercicios en torno al estrecho de Taiwán hasta las 17:00 horas del viernes, informó la agencia de noticias militares de Taiwán, citando al Ministerio de Defensa.
El Ministerio de Defensa Nacional condenó el hecho de que los militares chinos cruzaran deliberadamente la línea media del Estrecho e infringieran el espacio marítimo y aéreo en torno a Taiwán, y subrayó que los militares taiwaneses tomarán medidas decididas para salvaguardar la seguridad nacional y garantizar que la democracia y la libertad no se vean amenazadas», citó la agencia.
El ministerio no ha confirmado ni desmentido que los misiles hayan sobrevolado Taiwán. De ser cierto, sería la primera vez que misiles chinos sobrevuelan la isla autogobernada.
El Ministerio de Defensa taiwanés tachó las maniobras de «altamente provocativas» y afirmó que «tomaría medidas decididas para salvaguardar la seguridad nacional y garantizar que la democracia y la libertad no se vean amenazadas», pero añadió que se comprometía a no agravar la situación, según la agencia de noticias.
El Secretario de Estado de EEUU Antony Blinken también condenó el viernes los simulacros en curso de China, calificándolos de «escalada significativa».
«China ha optado por reaccionar de forma exagerada y utilizar la visita de la presidenta Pelosi como pretexto para aumentar la actividad militar provocativa en el estrecho de Taiwán y sus alrededores», dijo en una rueda de prensa durante una reunión con la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático en Camboya.
«No hay ninguna justificación para esta respuesta militar extrema, desproporcionada y escalada».
Se espera que los simulacros, que comenzaron el jueves, duren hasta el domingo.
Sanciones a Pelosi
China impuso este viernes sanciones a la presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi, y a su familia inmediata en respuesta a lo que el Ministerio de Asuntos Exteriores describió como una «provocación atroz».
China expresó repetidamente su oposición al viaje de Pelosi a la isla en disputa, pero la funcionaria estadounidense decidió no cancelar sus planes.
«Haciendo caso omiso de las graves preocupaciones y la firme oposición de China, la presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, Nancy Pelosi, insistió en visitar la región china de Taiwán. Esto constituye una flagrante injerencia en los asuntos internos de China. Socava gravemente la soberanía y la integridad territorial de China, pisotea gravemente el principio de una sola China y amenaza gravemente la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán», dijo un portavoz del ministerio en un comunicado.
«En respuesta a la atroz provocación de Pelosi, China decide adoptar sanciones contra Pelosi y sus familiares directos de acuerdo con las leyes pertinentes de la República Popular China», añadieron.
El comunicado no incluía detalles específicos sobre la naturaleza de las sanciones.
Los analistas políticos han advertido que la decisión de Pelosi de visitar Taiwán podría aumentar las tensiones entre Estados Unidos y China. Esta relación ha sido tensa durante años por cuestiones como Taiwán, la economía mundial y la invasión de Rusia en Ucrania.
En una llamada telefónica realizada el mes pasado, el líder chino Xi Jinping dijo al presidente estadounidense Joe Biden que no «jugara con fuego» con respecto a Taiwán. La Casa Blanca dijo en un comunicado que la política de Estados Unidos no había cambiado y que «se opone firmemente a los esfuerzos unilaterales para cambiar el statu quo o socavar la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán.»
El reclamo de China
El Partido Comunista Chino nunca ha gobernado Taiwán, pero lo reclama como territorio propio. Aunque el presidente chino, Xi Jinping, considera que la «reunificación» de Taiwán con el continente es una inevitabilidad histórica, recientes sondeos de opinión pública muestran que la mayoría de los taiwaneses no desean formar parte de China y, en cambio, quieren mantener el status quo.
China advirtió repetidamente a Estados Unidos contra la visita, que, según dijo, «atenta gravemente contra la soberanía y la integridad territorial de China». La Casa Blanca dice que la visita de Pelosi fue coherente con la política estadounidense sobre Taiwán y que no debe utilizarse para precipitar una crisis.
Los vecinos de Taiwán y los aliados de Estados Unidos en la región han expresado su creciente preocupación por la muestra de agresión de China.
El viernes, Tokio pidió a China que detenga inmediatamente sus simulacros. «Las acciones de China en esta ocasión tienen un grave impacto en la paz y la estabilidad de nuestra región y de la comunidad internacional», dijo el primer ministro japonés, Fumio Kishida.
Pekín defendió los simulacros militares, diciendo que estaban «en línea con el derecho internacional y la práctica internacional.»
«En cuanto a la ‘zona económica exclusiva’ que usted mencionó, debería saber, y la parte japonesa también debería saber, que China y Japón aún no han demarcado las aguas pertinentes, por lo que no existe la ‘zona económica exclusiva de Japón'», dijo Hua Chunying, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, en una rueda de prensa.
Con información de NBC News y CNBC.
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