¿Se avecina un estallido social?
0 views
Cada día que pasa se agrava la crisis que azota al pueblo venezolano, mientras el régimen de Nicolás Maduro solo intenta ganar tiempo con “diálogos”.
(Primer Informe)
El punto que podría provocar un estallido social sería la falta de gasolina. Esta última semana se ha evidenciado el gran problema que existe con la producción y distribución del combustible.
En casi todo el país se puede pueden ver las inmensas colas de carros y motocicletas en los alrededores de las bombas surtidoras de gasolina, mientras que los funcionarios del régimen llegan sin hacer cola y cargan tanto sus vehículos como cualquier cantidad de pimpinas, a cambio de sobornos (en efectivo) a los trabajadores del lugar.
¿Cuánto puede soportar un pueblo cansado de atropellos e humillaciones?
Aparte de la situación con la gasolina, está la carencia de los servicios básicos, ya que diariamente falla la electricidad hasta por 12 horas seguidas, como es el caso del estado Zulia, donde incluso cuando regresa la luz, a veces dura solo 15 minutos para volverse a ir.
El agua es otro de los dolores de cabeza de los venezolanos, existen comunidades donde llevan más de dos meses sin ver el vital líquido, por lo que se han visto obligados a pagar cisternas privadas, que de paso, ahora cobran en dólares, lo que dificulta más la situación.
Asimismo, no se puede obviar la ausencia del gas doméstico, en la mayoría de los hogares venezolanos es necesario el hidrocarburo para cocinar los alimentos pero se ha convertido en un calvario el poder conseguirlo, ya que Pdvsa gas ha disminuido considerablemente su distribución.
Por otra parte, la hiperinflación se comió el aumento del sueldo mínimo del pasado primero de mayo. El ciudadano de a pie debe hacer milagro con el dinero para poder cubrir los gastos mensuales de su familia, ya que los precios de todos los productos de la cesta básica aumentan casi a diario.
Por último, pero no menos importante, se encuentra el costo del pasaje para el traslado de las personas. El mismo es aumentado sin contemplación cada vez que así lo deciden los transportistas, sin importar que no haya sido aprobado los autoridades, así como tampoco toman en cuenta las protestas que esto genera.
El pueblo venezolano ha demostrado ser un pueblo noble, tranquilo, con una resistencia de hierro, pero todo tiene un límite y se está acercando. En cada ciudad se reportan varias protestas a diario, lo que demuestra el descontento que podría desencadenar en un estallido social que dejaría consecuencias insospechadas.
El pueblo de venezolano así como es tranquilo también en bravo, es un pueblo de luchadores y libertadores, que tarde o temprano alzará sus voces en defensa de sus derechos y en reclamo de su libertad.
Si te gustó la nota compártela
